La belleza florece desde las
ventanas de una antigua casa.
El rocío de la mañana humedece
la piel áspera por la noche y la
hija del Sol deja su forma humana
para volver al cielo.
Todo se desliza al mismo tiempo
como una coreografía.
Todo cambia menos yo.
El tiempo no pasa para mi.
No le tengo miedo a la eternidad
con destierro porque llevo una
herida en la frente y una harmónica
oxidada en el corazón.
No hay metáforas ni
oraciones que definan la libertad
de un amante decidido a dar
riendas sueltas a su lado mas humano.
El espíritu salvaje camina
a paso firme dejando
souvenirs de baladas a oídos
cansados de escuchar.
Hoy el portaretrato está vacío
pero sin tristezas por las fotos que no están.
Hoy el portaretrato está pensativo,
está a la espera de la foto que vendrá.
Sebastián Koutsovitis.
HOLA :)
ResponderEliminarespero q andes muy bien
besos
/CamiLa
que pena que pena inmensa...
ResponderEliminarun abrazo encantador
lidia-la escriba
www.deloquenosehabla.blogspot.com