sábado, 29 de agosto de 2009

Luces de Ciudad

Está sola la Luna y el Sol desde lejos
se queja del cielo y de la oscuridad.
Se ve a dos cuadras una estrella doncella
que desde su cuarto no para de llorar.

Pegó una patada la niña acorralada
y dejó una botella tirada en el bar.
Su corazoncito tiene hambre
quizás un calambre o un dolorcito de altar.

Las palabras no mienten ni engañan
pero si las personas que las unen al hablar.
Besos salados en cuerpos marcados
por un deseo de amor terrenal.

Una
mirada, sonrisa o un silencio
puede ser el mejor mensaje en este juego de azar.
Conquistas, derrotas, superávit o bancarrota,
vivir es un juego sin reglas ni final.
Sebastián Koutsovitis

3 comentarios:

  1. Las palabras no mienten ni engañan
    pero si las personas que las unen al hablar.... me encanto!!!!
    un beso!

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  2. Me encantó, especialmente la frase que tmb dijo el que firmó arriba!
    Te mando un beso Sebas :)

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